Estas son las personalidades tatuadas más importantes
Los tatuajes han dejado de ser una rareza hoy en día y cada vez son más tolerados y aceptados en el trabajo. La mayoría de los famosos de éxito se adornan con tatuajes visibles e incluso los convierten en su marca de fábrica, como David Beckham o Post Malone. Echemos la vista atrás unos cuantos siglos, a la época en la que personalidades verdaderamente significativas marcaron los tiempos hasta hoy a través de sus esfuerzos y obras, y nunca habrías pensado que ya entonces seguían la tendencia actual de los tatuajes.
Thomas Edison
El inventor de la electricidad y la bombilla no sólo trajo la luz a la oscuridad, sino que también proporcionó el modelo básico de la máquina de tatuar. Sí, así es. En 1876 desarrolló un bolígrafo eléctrico que en un principio pretendía facilitar la copia de textos. Pronto quedó claro que no llegaría muy lejos con esta idea. Sin embargo, el tatuador Samuel O'Reilly tomó el modelo del bolígrafo eléctrico y lo utilizó para desarrollar la primera aguja de tatuar que funcionaba a 50 puntadas por segundo. Thomas, como pionero decisivo de la actual máquina de tatuar, también estaba tatuado y llevaba cinco puntos dispuestos como los de un cubo en el brazo derecho.
R.H. Macy
El fundador del mayor operador de grandes almacenes de Estados Unidos, Macy's, lucía un tatuaje que le sirvió de inspiración para el logotipo de su ahora gigantesco imperio. Una estrella roja, que se hizo grabar durante su época de marinero.
Theodore Roosevelt
Según muchas historias y rumores, el 26º Presidente de los Estados Unidos también estaba tatuado. Llevaba el escudo de armas de su familia como un gran tatuaje en el pecho.
Winston Churchill
El ex Primer Ministro de Gran Bretaña Sir Winston Churchill fue considerado el estadista más importante del siglo XX y se tatuó al mismo tiempo. Obviamente tenía buen gusto y llevaba nuestro símbolo MyTattoo.com, el ancla, en el brazo.
Personalidades reales
Incluso reyes y nobles como el rey de Inglaterra, Harold II, llevaban el arte corporal en la piel. Harold II llevaba varios a la vez, lo que ayudó a identificarle tras su muerte. El Rey Eduardo VII se hizo grabar una cruz en el brazo durante su visita a Jerusalén. Su hijo y posterior rey Jorge V se tatuó un dragón durante un viaje a Japón.
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